¿Qué es el flúor? ¿Cómo se ha de utilizar? ¿Es seguro el uso de flúor en la infancia? ¿Qué es la fluorosis dental? En este post, respondemos a todas tus dudas.

El flúor es un mineral que ha sido, tradicionalmente, utilizado en la higiene dental para prevenir la caries dental y fortalecer los dientes. Lo encontramos en dentífricos y enjuagues bucales, pero, últimamente y sobre todo en redes sociales, se han generado muchas dudas y discusiones sobre su uso, sus posibles efectos secundarios a largo plazo o su eficacia ante posibles alternativas. ¿Qué es el flúor? ¿Cómo se ha de utilizar? ¿Es seguro el uso de flúor en la infancia? ¿Qué es la fluorosis dental?

En este post, vamos a intentar aclararte todo lo que necesitas saber sobre el flúor; cómo usarlo adecuadamente. Respondemos a las preguntas más frecuentes.

¿Qué es el flúor y por qué se usa en la higiene dental?  

 El flúor es un elemento químico que se encuentra de forma natural en la corteza terrestre, el agua, el aire y en varios alimentos. Entre ellos, pescados como el salmón o las sardinas, verduras como espinacas o lechugas, frutas como la uva o la manzana, el vino o el té.

El flúor tiene varias propiedades importantes, tanto a nivel químico como en su aplicación en el ámbito de la salud, especialmente en la higiene dental. ¿Por qué?
-Fortalece el esmalte dental. Tiene la capacidad de remineralizarlo, haciéndolo más fuerte y resistente a los ataques de ácidos producidos por bacterias en la boca que pueden causar caries. Junto a minerales naturales de la dentadura, como el calcio o el fosfato, forma un compuesto más resistente, la fluorapatita.
-Previene la caries. Al reducir la desmineralización del esmalte dental, el flúor previene la formación de caries ya que ayuda a que los dientes sean menos susceptibles al ácido producido por la placa bacteriana. Además, en concentraciones bajas y regulares, el flúor puede ayudar a revertir las caries en etapas muy tempranas.
-Acción antibacteriana. En concentraciones adecuadas, el flúor puede inhibir el crecimiento y la actividad de las bacterias en la boca, particularmente las bacterias que producen ácidos que dañan los dientes, como el Streptococcus mutans.
-Además de su acción sobre los dientes, el flúor tiene un efecto positivo en los huesos, ya que en pequeñas cantidades puede aumentar la densidad ósea.

¿Qué es la fluorosis?

Aunque el flúor es beneficioso en cantidades adecuadas, su exceso puede causar fluorosis dental, una condición que afecta a los dientes durante su desarrollo, provocando manchas, rayas o decoloraciones en el esmalte. Suele ocurrir cuando se ingiere demasiado flúor durante la infancia, etapa en la que los dientes permanentes se están formando. No es habitual, pero en casos moderados o graves, el esmalte dental puede empezar a mostrar signos de debilitamiento o porosidad, aunque generalmente no afecta a la función dental.

¿Qué causa la fluorosis?

La fluorosis se produce por:
-Ingesta excesiva o accidental de grandes cantidades de pasta dental o enjuagues bucales por parte de los niños, que tiende a tragar en vez de escupirlos.
-Uso desproporcionado de suplementos de flúor que se recetan para prevenir caries y que, si se toman sin control o en dosis demasiado altas, pueden llevar a la fluorosis.
-Ingesta abundante de agua potable con flúor que se encuentra en algunas regiones de países como India, China, Argentina, México o Kenia. O el consumo de alimentos procesados en estas aguas.

¿Es perjudicial para los niños el uso del flúor?

 No. El uso de flúor en niños no es malo en sí mismo, pero debe estar bien controlado por un adulto para evitar problemas por la exposición abusiva durante los años de desarrollo de los dientes, es decir, hasta los ocho años. Recordemos que los dientes permanentes comienzan a formarse desde el nacimiento bajo las encías y siguen desarrollándose hasta esa edad. Durante esta fase, el esmalte dental es particularmente vulnerable a la cantidad de flúor que el niño ingiere o utiliza.

¿Cómo podemos controlar el uso de flúor en niños?

-Supervisar a los niños mientras se cepillan los dientes para que utilicen solo una cantidad adecuada de pasta dental con flúor (aproximadamente del tamaño de un guisante) y que no la traguen.
– Evitar suplementos de flúor innecesarios,
ya que estos productos solo deben ser utilizados bajo recomendación médica o dental y, en el caso de los niños, deben estar adaptados a las necesidades específicas y a la cantidad de flúor a la que ya está expuesto.
-Usar pastas dentales diseñadas para la edad del pequeño,
ya que cuentan con cantidades controladas de flúor.
-Los enjuagues bucales con flúor no se recomiendan
para niños pequeños, ya que es más probable que los ingieran.

¿Qué dice la OMS sobre el flúor?

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce que el flúor es efectivo para prevenir las caries dentales porque se ha demostrado que ayuda a fortalecer el esmalte dental, haciendo los dientes más resistentes a los ácidos producidos por las bacterias en la boca. Además, lo considera valioso para mineralizar las áreas del esmalte que han comenzado a desmineralizarse. Por ello, apoya el uso del flúor como una herramienta eficaz para la prevención de caries dentales, pero también enfatiza la necesidad de controlar la exposición para evitar efectos adversos como la fluorosis dental. 

Entonces, ¿flúor sí o no?

 En conclusión, sí. El flúor es esencial en la prevención de la caries dental y la promoción de la salud bucal si se usa de manera adecuada y bajo las recomendaciones de un dentista.
Por supuesto, si tienes dudas, puedes consultarnos para obtener recomendaciones personalizadas sobre el uso del flúor y otros aspectos de tu salud bucal.

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