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Cómo mantener una buena salud bucal en la tercera edad

Cada vez, disfrutamos de una tercera edad con mayor calidad de vida. Pero ¿cuidamos nuestra boca al igual que lo hacemos con el resto del cuerpo? Porque, nuestro cuerpo cambia con los años y nuestra boca no es una excepción. Y aunque muchos mayores piensan que los problemas bucales son “normales” con la edad, la salud bucal es fundamental porque influye en la alimentación, el habla, la autoestima y hasta en la salud general.

¿Qué problemas bucales son más comunes en la tercera edad?

Sequedad bucal o xerostomía. La saliva es fundamental para neutralizar ácidos y proteger los dientes; sin ella, aumenta el riesgo de caries e infecciones. Y en personas mayores, es muy común sufrir sequedad bucal, especialmente en quienes toman múltiples medicamentos como antidepresivos, antihipertensivos o diuréticos.

Enfermedad periodontal. Es una infección de las encías que puede comenzar con inflamación y sangrado (gingivitis) y evolucionar hacia una periodontitis, que daña el hueso que sostiene los dientes. Si no se trata, puede llevar a la pérdida dental.

Caries radiculares. En las personas mayores, la retracción de las encías deja expuestas las raíces de los dientes, que no están protegidas por esmalte y son más vulnerables a las caries. Estas caries pueden avanzar rápidamente y causar dolor o infecciones.
Sensibilidad dental. Con el paso del tiempo, el esmalte dental —la capa protectora del diente— se va desgastando, dejando expuesta la dentina, que es más porosa y sensible a estímulos como el frío, el calor o los alimentos ácidos. Además, la retracción natural de las encías puede dejar al descubierto la raíz, que no está protegida por esmalte y es especialmente sensible.

Prótesis desajustadas. Con el tiempo, la forma de la boca cambia y las prótesis pueden dejar de encajar correctamente, lo que puede provocar rozaduras, llagas o úlceras, generando dolor e incomodidad al hablar o al masticar. Además, las prótesis inestables pueden favorecer la acumulación de placa bacteriana y restos de comida, aumentando el riesgo de infecciones.

Candidiasis oral. Es una de las infecciones que puede provocar una prótesis desajustada pero también se da en personas con boca seca o con sistemas inmunológicos debilitados.


¿Es normal perder dientes con la edad?

No, no deberíamos asociarlo inevitablemente con el envejecimiento. La pérdida dental en la tercera edad suele estar relacionada con problemas acumulados como caries profundas, infecciones o enfermedades en las encías, especialmente la periodontitis (trastorno que afecta al tejido que rodea y sostiene los dientes y que, si no se trata, puede llevar a la pérdida de piezas dentales). Todas estas afecciones suelen ser causadas, con mayor probabilidad, por la respiración oral y la deficiencia en el flujo salival y la clave, como siempre, está en la prevención. Con visitas regulares al dentista, una higiene adecuada y tratamiento a tiempo, es completamente posible mantener los dientes naturales durante toda la vida.


¿Cómo afecta la salud bucal al resto del cuerpo en los adultos mayores?

Enfermedades cardiovasculares. Las bacterias de infecciones bucales pueden entrar en el torrente sanguíneo y llegar al corazón, aumentando el riesgo de endocarditis, infartos o accidentes cerebrovasculares.

Problemas respiratorios. La aspiración de bacterias bucales puede causar infecciones pulmonares como neumonía, una de las principales causas de hospitalización en la tercera edad.

Nutrición deficiente. Muchas personas mayores llevan dietas blandas y pobres en nutrientes por sufrir dolor dental, pérdida de piezas o prótesis mal ajustadas. Esto debilita al organismo y favorece la pérdida de masa muscular o la desnutrición.

Diabetes. Existe una doble relación: la diabetes mal controlada favorece la enfermedad periodontal, y la infección crónica de las encías puede dificultar el control glucémico, empeorando la diabetes.

Problemas cognitivos. Estudios recientes apuntan a una posible relación entre enfermedades de las encías y el deterioro cognitivo, incluyendo Alzheimer. Aunque aún se investiga, la inflamación crónica causada por bacterias orales puede ser una de las causas.


Como vemos, una boca sana es fundamental para el cuidado integral de las personas mayores. Lo recomendable es acudir al dentista cada seis meses, pero con enfermedades crónicas o prótesis, es mejor acortar esos plazos y pedir cita cada tres o cuatro meses.

Si eres mayor y tienes alguna duda sobre cómo cuidar tu boca, podemos ayudarte. Además, contamos con tratamientos odontológicos adaptados a tus necesidades: ¡no tienes por qué resignarte a tener una mala dentadura!

Foto de Andrea Piacquadio en Pexels